El objetivo de las Directivas ATEX es prevenir las explosiones y/ o proporcionar protección frente a ellas, estableciendo las obligaciones del empresario para conseguirlo.
Como establece la normativa actual, el empresario debe velar por la protección de la salud y la seguridad de sus trabajadores que puedan verse expuestos a riesgos derivados de una atmósfera explosiva, siendo la presencia de gases, vapores, nieblas o polvos inflamables con concentración suficiente en el ambiente en la que, después de una ignición, la combustión se propaga a la mezcla no quemada.
Garantizar la prevención y protección contra explosiones.
Evaluar los riesgos específicos que surgen de atmósferas potencialmente explosivas.
Coordinar todos los trabajos que se desarrollen en Zonas con Riesgo de Explosión.
Clasificar las Zonas con Riesgo de Explosión. (Zonificación)
Elaborar y mantener un Documento de Protección contra Explosiones. (DPE)
Normativa ATEX
Las tres normativas que regulan la Prevención de Riesgos en Atmósferas Explosivas son las siguientes:
Algunos ejemplos de industrias afectadas por esta normativa son: